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Derrame de ácidos clorhídrico puso al descubierto falencias en la seguridad de los colectivos

El lunes se registró un gravísimo episodio en la Terminal de micros de la ciudad de San Carlos de Bariloche que puso al descubierto las falencias de la seguridad del transporte de pasajeros de larga distancia.

Un empleado de la empresa Andesmar quiso cambiar una encomienda de colectivo y mientras manipulaba la caja se cayó al piso de la bodega del micro y se rompieron los envases de las botellas cargadas de ácido clorhídrico que venían en el interior de uno de los bultos y que tenían como destino a Esquel.

Producto de ello algunos pasajeros manifestaron irritación de ojos y garganta. Pero fueron los propios viajeros, víctimas del químico, que pusieron en alerta a las autoridades, debiéndose constituir en el lugar personal de la Policía Federal, Inspectores de la Municipalidad de Bariloche, Bomberos Voluntarios, Defensa Civil e inclusive Técnicos del Centro Atómico Bariloche.

Inmediatamente se montó un operativo de seguridad en los andenes 4 y 5 de la Terminal para evitar que los curiosos se aproximaran y dejaran trabajar al personal de Bomberos Voluntarios y Policía Federal, respectivamente.

El micro de la empresa Andesmar había partido desde Mendoza y tenía como destino final a la ciudad de Esquel cuando el lunes por la tarde sufrió este accidente en la Terminal de San Carlos de Bariloche.

Denuncia presentada

Los involucrado de este accidente sería la firma Dalton Productos Químicos SRL, de la ciudad de Las Heras, provincia de Mendoza, y la Droguería Drosan de Esquel, y en ese sentido trascendió que la Municipalidad de la ciudad rionegrina habría resuelto presentar una denuncia en el Juzgado Federal a cargo del Dr. Leonidas Moldes para que se investigue la responsabilidad de ambas firmas en el derrame de sustancias peligrosas en la Terminal de Bariloche.

En su edición online de ayer miércoles, el diario El Ciudadano de Bariloche hacía referencia de que la denuncia la presentó el asesor legal de la Municipalidad, el Dr. Daniel Balduini, quien argumentó que fue promovida razón por la cual de que la justicia federal investigue las responsabilidades de la empresa que despachó la encomienda y del destinatario. Pero también pidió que se investigue a la empresa Andesmar “en relación al transporte de sustancias peligrosas en violación a la legislación vigente (Ley 24.051)”, según el texto de la denuncia.

Es de destacarse que el envío de este tipo de productos en encomiendas comunes puede constituir un delito.

Además la Municipalidad de San Carlos de Bariloche, facilitó a la justicia el acta de decomiso, donde se fundamenta minuciosamente el contenido de los envases que se transportaban, la guía de envío con el remitente y el destinatario del producto. Asimismo, se puso a disposición la mercadería decomisada y los frascos rotos.

No sabe, no contesta.

En la oficina de Andesmar que funciona en la Terminal de Esquel dijeron desconocer el incidente, aclarando que en la parte de atrás de las guías de envío se puntualiza la prohibición que rige del transporte de sustancias peligrosas en medios de transporte público, desligándose de cualquier otro tipo de control sobre la mercadería en tránsito.

Por otra parte, el personal de la Delegación Esquel de la Dirección de Transporte de la Provincia del Chubut, evitó pronunciarse aduciendo que el único autorizado para dar cuenta de las inspecciones que se realizan en este sentido es el flamante Jefe del área, Oscar Quilodrán, quien por razones que se desconocen todavía no habría asumido al frente de esta oficina en reemplazo de Deliria Cerda.

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